Mi frase




MI Frase
"Cuando la vista se cruza con el deseo, haz que impere la razón".
(José A. Puig)





jueves, 29 de marzo de 2018

LA TRAICIÓN


En estas fechas, la pasión de Jesús, uno siempre tiene presente al traidor Judas Iscariote. Este miembro de los Doce Apóstoles traicionó a su amigo por unas tristes 30 piezas de plata. Con su beso, Judas, llevó a la crucifixión al Hijo de Dios. En la historia de la humanidad se cuentan hazañas de gran valentía donde los hombres luchan y mueren por defender su pueblo, sus familias y sus ideas. Pero como hay actos loables también los hay detestables. La confianza es algo que el ser humano valora mucho y solo hay un acto que es capaz de destruir por completo esto: la traición. Traicionar es defraudar, es una violación de la fidelidad u honestidad que se debe. Dante Alighieri ubica a los traidores en el último círculo (el noveno) del infierno ya que considera a la traición como el peor pecado de todos. La razón es que, a diferencia de otro tipo de crímenes, para traicionar primero hay que ganarse la confianza y el afecto de la víctima.
Dante, en contraste con la imagen popular del Infierno como ardiente, sitúa a los traidores congelados en un lago de hielo conocido como Cocito, en donde cada grupo está encajado a profundidades cada vez mayores. Estos grupos son cuatro zonas o “rondas” concéntricas de traidores que corresponden, en orden de seriedad de su traición. La primera, son los traidores de sus propios familiares (ronda “Caina”). La segunda se llama “Antenora”, contiene a los traidores a las entidades políticas (partido, ciudad, o país). La tercera la llama “Ptolomea”, en honor a Ptolomeo, hijo de Abobi, quien invitó a Simón Macabeo y a su hijo a un banquete y después los mató, aquí los traidores están castigados más severamente ya que la traición es por pura voluntad. La última ronda se llama “Judeca”, en honor a Judas Iscariote, el traidor de Cristo, aquí están los traidores a sus benefactores. En el centro del Infierno, condenado por cometer el último pecado (la traición hacia Dios), está Satanás.
La traición está íntimamente ligada al engaño y el engaño tiene su raíz en la mentira. Mentir es afirmar algo que es falso, aun cuando no sepamos que no es cierto. Algo distinto es engañar, en este acto existe una voluntad, una premeditación, la búsqueda de un beneficio y, por qué no, hasta el perjuicio de otra persona. Desde el Antiguo Testamento la traición es definida, relatada, y atribuida siempre al cobarde y al tramposo. Caín fue castigado, no por la acción de matar, como en verdad lo hizo, sino por traicionar al Creador. Y ya con el beso de Judas, la traición comienza su nueva era aliada al poder, ya fuera eclesiástico o seglar, pasando a ser su verdadera potencia de destrucción; dura, cortante y artera. Y hasta nuestros días, pero especialmente hoy, el poder político nace y vive atado a ella; y la traición le confiere al poderoso el estigma de haber siempre jugado, a través de ella, el más indigno papel de toda la existencia.
La mayor muestra de traición en nuestro país la están mostrando los independentistas catalanes, que utilizan la traición con impecable maestría, de tal manera que su alevosía y maldad desde el pueblo llano son  imperceptibles. Un pueblo que, en su ignorancia, se transforma en instrumento ciego de su propia destrucción, incapaces de ver la ambición, la intriga y la traición de aquellos que los someten; un pueblo que adopta como realidades las que son puras ilusiones, manteniéndose ajenos de todo conocimiento político, económico o civil y capaces de tomar la traición por patriotismo y la venganza por la justicia. Es la traición de unos utilizada para dominar a unos seres sobre otros. Es la deslealtad de una persona al querer voluntariamente herir a otra, hacer daño aun sabiendo que es difícil conseguir su deseo. El rey, así lo definió en su mensaje de octubre pasado, ante la pretensión final de la Generalitat de que sea proclamada –ilegalmente- la independencia de Cataluña: “Con sus decisiones han vulnerado de manera sistemática las normas aprobadas legal y legítimamente, demostrando una deslealtad inadmisible hacia los poderes del Estado. Un Estado al que, precisamente, esas autoridades representan en Cataluña”.
Una deslealtad o traición que exige voluntad para llevarla a cabo. Una premeditación y la búsqueda de un beneficio hasta el perjuicio de otra persona. Esto es lo que han hecho los independistas catalanes con cálculo, intencionalidad y deliberación. Es así al realizar su Libro Blanco de la Transición Nacional de Cataluña, un informe completo en el que se analizaban distintos aspectos a tener en cuenta para el proceso de transición de Cataluña hacia un país independiente y que las fuerzas políticas soberanistas han impulsado desde entonces. Este libro fue el fruto de los 18 informes que, el “Consejo Asesor de Transición Nacional” entre julio de 2013 y julio de 2014, entregó a la Generalidad de Cataluña. Una hoja de ruta que les ha ido llevando día a día a la traición sin límites, a un bucle maléfico que ha mostrado su voluntad pérfida de traición hasta en sus propios adeptos. Pensemos en aquel Junqueras que, en una entrevista desde la cárcel de Estremera en febrero pasado, apuntó a la secretaria general de ERC, Marta Rovira, como posible candidata: “Es un gigante, una persona en la que todos confiamos”. Hoy esa gigante “en la que todos confiamos” ha utilizado la deserción yéndose a Suiza para huir de la Justicia sin importarle haber dejado tirados a sus compañeros en la carrera hacia un independentismo imposible. Una Rovira que ha desertado, que ha abandonado ese soporte que los suyos le habían dado, un soporte reconocido por ella con lágrimas de plañidera en su frase, tantas veces publicada: “Moltes gràcies pel vostre suport. No defallirem”. Pero como decíamos anteriormente, la traición confiere al poderoso el estigma de haber siempre jugado, a través de ella, el más indigno papel de toda la existencia.

José Antonio Puig Camps. AGEA Valencia (Dr. Ingeniero y Sociólogo)
Blog: http://josantoniopuig44.blogspot.com.es/
Twitter: @japuigcamps
Publicado 29-03-2018

No hay comentarios:

Publicar un comentario