Mi frase




MI Frase
"Cuando la vista se cruza con el deseo, haz que impere la razón".
(José A. Puig)





domingo, 20 de julio de 2025

UNA LEGISLATURA PODRIDA

Mantener abierto el interés de los lectores ante el panorama político español es difícil. Lo es, porque a la vista de todos los acontecimientos que se están produciendo, con ese goteo constante de personas y personajes imputados y con unas noticias que galopan sin descanso alguno dando escandalo tras escándalo, solo queda el deseo de conocer el fin de esta legislatura podrida. Una legislatura donde la mentira y la corrupción rezuma por todos los poros de este gobierno. Todo es puro maquillaje y teatro. Ese mantra de que “la economía española va como un cohete”, es maquillar la realidad. Lo es, porque la noción de crecimiento es unidimensional y debe ir acompañada a la noción de desarrollo, que al ser de naturaleza macroscópica nos informa sobre la mejora en las condiciones materiales de la vida y los avances sociales en una economía. Su mantra omite que son otros datos de naturaleza cualitativa los que deben valorarse: la escolarización de los niños, el grado de abandono escolar temprano, la calidad de la educación; la evolución del paro y tasa de empleo, el riesgo y nivel de pobreza (sobre todo la infantil); acceso a la vivienda; la calidad de las instituciones, etc. ¿Ese crecimiento que calidad aporta? 

Lo que el crecimiento de España está aportando a la calidad de vida ciudadana es más bien poca. Hechos: El apagón del pasado 28 de abril que afectó entre siete y catorce horas a todo el país, es histórico. Los repetidos fallos en la Alta Velocidad que ha dejado abandonados a cientos de pasajeros en medio del páramo y 18 trenes afectados por un fallo en la catenaria. El desbarajuste en el control de pasaportes en la T4 (aeropuerto de Barajas) y que afectó a dos terminales. La de ciudadanos que tienen que perder su casa por una ocupación a la que el gobierno no le quiere poner freno. El cinismo de no ayudar a los valencianos por la Dana al ser de otro partido. Y para más inri, la incapacidad de este gobierno de dar respuesta a todo este caos de los servicios públicos. ¿Es pues, acorde el crecimiento con el desarrollo del país? ¿Ese crecimiento económico está beneficiando a toda la ciudadanía? De no contestarse afirmativamente, y ser conscientes que nunca España ha tenido tantos ingresos por impuestos y fondos europeos, la pregunta es: ¿Dónde está ese dinero?

Parte importante se queda para repartirlo entre los socios parlamentarios de Sánchez, que son los auténticos beneficiarios de esa estructura política. Unos socios dispuestos a dejarle gobernar siempre que sea a beneficio propio y cobrar a precio de oro su apoyo a un Ejecutivo consciente de su estado agónico. Los diferentes grupos nacionalistas y separatistas ven en la ansiedad de este presidente por conservar el poder una formidable oportunidad política para sacarle todo lo que quieran y más. Es una legislatura podrida que solo puede aguantar mientras haya espacio para desmontar las bases constitucionales que beneficien al bloque Frankenstein. Unas bases que son un largo inventario de reclamaciones rupturistas y que ven ahora la posibilidad real de obtenerlas. Y ante toda esta podredumbre aún tienen la osadía los miembros de este gobierno a pedir respeto tras la contundente respuesta de Feijoo a un Sánchez que pretende tapar su historia personal cargando de reproches al adversario político. 

Esta legislatura, en estado de descomposición, no la han podido enderezar ni los cientos de asesores del presidente Sánchez, y eso que lo han intentado desde que cogió el poder tras el 23 J. Primero con la estrategia del muro: el enfrentamiento; pero los escándalos en aquel 2024 la interrumpió. Luego la estrategia del fango, bulos y desinformación que la oposición utiliza, pero también se va al traste ante el demoledor informe de la UCO sobre la corrupción en el gobierno y en Ferraz. Y ahora la etapa del duelo: pedir perdón y árnica a sus socios para que le sigan echando un cable en su comparecencia en el Congreso para hablar de la corrupción, ¿cómo no?, y lo hacen desplazando las culpas a la oposición. El error de Sánchez fue envalentonarse al ver que sus socios no lo dejaban, y volver a citar aquella famosa foto del narco y los casos de corrupción del PP para tapar la suya. Su chulería recogió la respuesta inesperada de Feijoo: “¿Pero con quién está viviendo usted? ¿Pero de qué prostíbulos ha vivido usted? Partícipe a título lucrativo del abominable negocio de la prostitución”. Es mentar la soga en casa del ahorcado. Sus compinches se rasgan ahora las vestiduras. Pero la legislatura esta corrompida, navega sin rumbo, sin capacidad presupuestaria, con un uso mercantilista del poder, sin servicios públicos en condiciones y que ha dejado de respetar, en letra y espíritu la Constitución.

José Antonio Puig Camps (Dr. Ingeniero Agrónomo y Sociólogo)
Publicado 15-07-2025 

martes, 24 de junio de 2025

LA MISERIA MORAL

 

Vilfredo Pareto quiso dedicarse a la sociología, porque entendía que la vida humana está dominada por acciones ilógicas. Tal vez tuviera razón al ver como en nuestra sociedad se está confundiendo la ideología con el fundamentalismo y se obedece ciegamente las órdenes del dictador de turno. Esta creencia y defensa estricta a los deseos del autócrata dejando siempre de lado hechos facticos, se conoce en psicología con la expresión: “suspensión de la incredulidad”, que significa que cualquiera puede creer los hechos más increíbles al estar predispuestos a aceptarlos. El miserable moral se aprovecha de esta circunstancia para conseguir su propio beneficio. Para estos sujetos la verdad ha perdido todo valor al carecer de integridad, honestidad y sentido de la justicia.

Los españoles asistimos asombrados a este tipo de miseria moral ante hechos despreciables cometidos por personas que deberían tener gran talla política y social y ser ejemplo de aquel giro regeneracionista que hace siete años prometió aquel Pedro Sánchez al presentar la moción de censura a Mariano Rajoy. Una moción oscuramente negociada con partidos apátridas y cuya defensa corrió a cargo de José L. Ábalos con un discurso que defendía el “código ético del Psoe” y establecía que “La decencia debe ser algo esencial y no accesorio”. Hoy podemos observar con indignación la hipocresía y miseria moral del que fuera símbolo del Psoe y secretario de organización, que ha unido su futuro judicial al del inefable Koldo García y al tercer componente de la trama y sustituto, Santos Cerdán. Un equipo que trabajaba con un sentimiento de impunidad que les hacía creer invulnerables al trabajar al servicio del partido. Personas leales que hacían el trabajo sucio, ensalzaban al líder y arremetían contra los enemigos del partido, resultando muy útiles el secretario general, aunque lo abocarán al abismo.

La agenda perversa que el investido Pedro Sánchez tenía en su cabeza no era otra cosa que tomar el poder absoluto del Estado. Tras esos siete años, sus esfuerzos se han dirigido a tomar con toda indignidad los tres poderes del Estado: ejecutivo, legislativo y judicial. Con el poder ejecutivo no tuvo problemas solo tenía que elegir a veintidós ministros que siguieran a pie juntillas su agenda a base de transformarlos en ministerios de propaganda, bulos y mentiras. Para tomar el poder legislativo solo tenía que convencer a comunistas, herederos de ETA, la burguesía del PNV y los secesionistas catalanes (ERC y Junts, autores del golpe de 2017), concediéndoles indultos, amnistía, reforma del código penal, condonaciones, inversiones y lo que deseen. De cara a la galería los etiqueta como la “mayoría social progresista”, vulgo gobierno Frankenstein. Toda esta maniobra necesitaba de un fiscal general del Estado y de un presidente del Tribunal Constitucional, con la misma categoría moral que su proyecto político, dispuestos a mantenerlo a toda costa hasta 2027.

Con el poder ejecutivo esclavizado, el poder legislativo amamantado y los sindicatos abrevados, el paso siguiente es hacerse con el poder judicial. Con la corrupción que le rodea política y familiar, si no domina totalmente a jueces y fiscales le va a resultar difícil continuar en la Moncloa. Es cuando saca un nuevo as de la manga: la Reforma del Poder Judicial. De aprobarse, su camino esta allanado, habrá conseguido el dominio absoluto de los tres poderes y, con ello, eludir toda la carga judicial que le acorrala. Una asquerosa trama de corrupción confirmada por el informe demoledor de la UCO, los miles de archivos en poder de los jueces, las grabaciones y los testimonios.

La irrupción de la guardia civil, vía UCO, en la sede histórica del Psoe (33 años después) por orden del Tribunal Supremo, es la muestra gráfica del hundimiento moral presenciada en Ferraz y el epitafio de una autarquía enferma de poder. Tras los siete años el “sanchismo” ha subvertido el Estado de derecho de los españoles, una acción que tendrá consecuencias graves para la libertad, la justicia y los derechos humanos. Como entendía Pareto, la vida humana está dominada por acciones ilógicas ¿Hay algo más ilógico, tras los informes, grabaciones y testimonios, que el Psoe tenga aún un suelo del 28% de votantes y tantos defensores a ultranza, sin importarles tanta corrupción? Sánchez ya se ha encargarlo de aclararlo, se debe aceptar todo pues, o yo o el caos. Es el arma de los dictadores.

José Antonio Puig Camps (Dr. Ingeniero Agrónomo y Sociólogo)

Publicado 24-06-2025

 

domingo, 1 de junio de 2025

EL HASTÍO

 

Cuando hablamos de hastío lo podemos referir a dos conceptos principales: el desgaste o aburrimiento producido por algo que se consume en exceso o un sentimiento de disgusto o tedio. Esta segunda definición se refiere a un estado emocional más general, donde la persona siente desinterés, aburrimiento, o una falta de motivación hacia las actividades cotidianas o el mundo en general. El optimismo recuperado por los españoles en la Transición ha ido decayendo gobierno tras gobierno hasta llegar a la situación actual donde se revela la insatisfacción existente por, los continuos casos de corrupción, la falta de respeto institucional y los “manejos entre bambalinas” de un gobierno sin mayorías. Cuando la única respuesta del ejecutivo es decir que todo son conjeturas de la derecha y la extrema derecha, el ciudadano empieza a pensar (que es lo peor para un gobierno) que les está mintiendo. Cuando la mentira no se penaliza y, por el contrario, sirve de coartada para seguir adelante sin dar explicación alguna, el ciudadano esta hastiado, harto de esta situación.

Son muchos españoles que se cuestionan si ese hastío, que lleva a perder interés por los acontecimientos políticos que día tras día bombardean a nuestra sociedad, no será conscientemente provocado por el poder establecido. Pensar así, no resulta conspiratorio ante el oscurantismo, opacidad, y falta de transparencia e integridad, que el Ejecutivo muestras en todas sus comparecencias. La ciudadanía está cansada de los continuos reproches, falta de respeto y respuestas irónicas ante situaciones tan graves como las que estamos viviendo. Harta de tantos intentos de distracción mediática de aquellos medios de comunicación alineados con interese empresariales o políticos para dispersar la atención política y fomentan el olvido selectivo. Aburridos por la polarización como mecanismo de defensa, magnificando la corrupción del “otro” y minimizando la “propia”. Es cuando el hastío, se convierte en una herramienta para una gobernanza sin reproches.

Es así, como se entra en una actitud de resignación y falta de interés por la vida política. Es la desesperanza ante una situación que no tiene posibilidad de recambio. Es el silencio que lleva irremediablemente a la muerte social de una persona o grupo de personas, es el “qué más da” o lo que es peor, la rapidez con que la sociedad española olvida o desactiva su indignación ante los casos de corrupción del Estado. Una sociedad donde la comunicación es limita o inhibida, es una sociedad silente, sorda y muerta políticamente. Es la sociedad deseada por los malos gobiernos conocedores de que la saturación y normalización de la corrupción, ante la repetición de escándalos (muchos a gran escala), hace que lo excepcional pasa a ser lo habitual, generando un efecto de “anestesia social” que lo normaliza.

¿Cómo no va a ver hastío en una sociedad que observa la falta de consecuencias reales ante tantos escándalos? ¿Cómo no desesperanza al ver que se transmite la idea de que el poder político tiene una red de protección que lo blinda? ¿O, cómo no desánimo cuando se ve que hay millones de personas capaces de renunciar al Estado de derecho por mantener en el poder a un hombre? Aunque la desmemoria social frente a la corrupción tiene raíces profundas, nada es eterno. Una ciudadanía crítica, informada y organizada puede romper el ciclo. El papel de la sociedad en la lucha contra la corrupción y el desmantelamiento institucional es fundamental. La queja sistémica no cambia gobiernos. Los cambia, la denuncia, la exigencia de transparencia institucional, las movilizaciones sociales, los medios independientes y un poder judicial independiente crucial para un Estado de Derecho.

 

José Antonio Puig Camps (Dr. Ingeniero Agrónomo y Sociólogo)

Publicado 01-06-2025 (ד 010636)